Hoy alguien me ha mandado un mensaje que me ha parecido precioso y que me gustaría compartir en el blog con todos vosotros.
¡Eh ahora!¡Ven, ahora!
¿Por dónde vas ahora?
¿Arriba, abajo, cerca, lejos,aquí, allí o más allá?

Pero hace mucho se alejó y nadie sabe dónde habita ahora.
El manto de María brilla a la luz de la luna, mientras allá a lo lejos, en la cima ella baila. Lleva alrededor de sus pies una bruma de plata.

Bajo la luna y las estrellas María fue alejándose,estriándose en sendas encantadas,más allá de los días, dónde las sombras yacen.

Allí dejó la vida y le enseñan canciones, cuentos maravillosos. La visten de blanco precedida de siete luces hasta el cielo.

Entró en uno de sus salones, dónde no existe el tiempo, dónde hay dulces manantiales de plata.

Las alas la llevaron, como una luz errante, más allá de la montaña. Entonces se volvió deseando encontrar otra vez la luz del hogar, y ardiendo como una estrella solitaria, fue por encima, como fuego distante al sol, maravilla que precede al alba,así pasó sobre la tierra.

Y escuchó el llanto de la madre.

Pero un destino pesaba sobre ella. Pasar como una estrella en órbita sin detenerse. Y no conoce descanso.

Su misión:
llevar la claridad resplandeciente. La luz del "AMOR"

PARA MARÍA

Bella es la luz del sol,
más bella aún es la luz de la luna y la centelleante hueste estelar.
Bellos son los campos,
más bellos son los bosques ataviados con brillante vestido de primavera.
Pero más bella es María, más pura.
¡ Qué hace cantar nuestros entristecidos corazones!
María brilla resplandeciente,
María brilla con más pureza.
¡De la que todos los ángeles del cielo pueden jactarse!



Gracias por este poema, es precioso.